Gobierno
Acuerdan México y China llevar la relación a un nuevo nivel
Los presidentes Xi Jinping y Andrés Manuel López Obrador acordaron llevar las relaciones entre China y México “a un nuevo nivel” durante la primera reunión de ambos mandatarios, donde acordaron combatir el tráfico ilegal de precursores químicos usados para elaborar el fentanilo.
“Concedo suma importancia al desarrollo de las relaciones binacionales y estoy dispuesto a trabajar con usted para (…) llevar las relaciones entre los dos países a un nuevo nivel”, dijo el presidente chino al comienzo del encuentro celebrado en un hotel en el centro de San Francisco.
Xi también felicitó López Obrador por el “camino de progreso y reformas” por el que ha llevado a México desde que asumió el poder hace cinco años, y le dio sus condolencias por la tragedia en Guerrero, región golpeada por el huracán Otis.
“China concede gran importancia a la solicitud de México de comprar suministros en respuesta al desastre, y las autoridades competentes han ayudado urgentemente a México a contactar con las empresas chinas”, dijo Xi Jinping, de acuerdo con la embajada de China en México.
Al respecto, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) indicó que China aportará 250 mil unidades de enseres básicos para las personas afectadas.
Los mandatarios conversaron a puerta cerrada durante una hora al margen del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), donde discutieron su cooperación “en temas esenciales”, como el combate al tráfico de precursores químicos de drogas sintéticas.
La canciller mexicana, Alicia Bárcena, indicó en la red X que México y China “cuentan con 51 años de sólidas relaciones diplomáticas y cooperan en temas esenciales, como el combate al tráfico de precursores químicos de drogas sintéticas”.
“Cómo hacer un mejor control de lo que sale de Asia y de lo que llega a México, porque hay lógicamente una línea de precursores de fentanilo que es legal que se va a los medicamentos anestésicos y cosméticos y la parte que no es legal”, dijo .
En un posterior comunicado, la Presidencia de México detalló que López Obrador remarcó “la necesidad de intercambiar información y lecciones aprendidas en la lucha contra el tráfico ilícito de precursores químicos”. Además, “enfatizó la importancia de alcanzar un acuerdo para intercambiar información sobre embarques que salen de Asia”.
López Obrador, que ha negado que en su país se fabrique fentanilo, envió en abril pasado una carta a Xi pidiendo que cooperara en la lucha contra esta droga, pero China se desentendió entonces.
Las fuentes del gobierno mexicano subrayaron que “México buscará fortalecer un mecanismo de diálogo con Pekín, que tiene el potencial de aumentar sustancialmente la cooperación y el intercambio de información para combatir el tráfico de sustancias ilícitas y regular sus precursores de manera institucional”.
El miércoles, durante una reunión con el presidente de EU, Joe Biden, Xi aceptó tomar medidas para cortar el suministro de químicos para la producción del opioide sintético. Ante este acuerdo, EU afirmó que a México le corresponde reforzar sus aduanas, invertir en recursos de la Procuraduría y hacer valer la ley dentro del país” para frenar el tráfico de fentanilo.
El secretario adjunto del Departamento de Estado para América Latina, Brian Nichols, indicó que su vecino del sur también debe investigar cuáles son “las empresas involucradas en el suministro” de estos químicos y cómo se extienden sus “redes financieras ilícitas”.
Según Washington, los cárteles mexicanos usan los precursores químicos procedentes de China para fabricar este opioide, cincuenta veces más potente que la heroína, y posteriormente lo venden ilegalmente en Estados Unidos.
Lo invita a México
López Obrador invitó a México al presidente chino para “conocer los proyectos prioritarios del #PlanSonora y el Corredor Interoceánico” del Istmo de Tehuantepec, dijo la cancillería mexicana.
China está interesada en ampliar la cooperación con México en finanzas, construcción de infraestructura, vehículos eléctricos y otras industrias emergentes, dijeron medios chinos citando a Xi.
López Obrador, que suele evitar este tipo de compromisos internacionales, se reunió también con el primer ministro canadiense, Justin Trudeau.
El presidente dijo en la red social X que abordaron el tema migratorio y “nos expresó la confianza de empresarios de su país para continuar invirtiendo en México y crear empleos”.
También tenía programada ayer una reunión con el primer ministro de Japón, Fumio Kishida. y hoy se encontrará con el presidente de Estados Unidos, principal socio comercial de México.
La cumbre del APEC, que reúne a 21 economías del bloque Asia-Pacífico, con Colombia e India de observadores, tomó impulso en San Francisco el miércoles con la extensa reunión entre Xi y Biden, donde los líderes de ambas superpotencias acordaron restaurar su comunicación militar y ofrecieron señales de aguas más calmas.
Con este telón de fondo, la cumbre de líderes comenzó con la incógnita de si sus miembros lograrán consensuar una declaración final debido a las divergencias en torno a las guerras en Ucrania y Oriente Medio y temas comerciales.
El encuentro tiene por objetivo promover alianzas, proteger cadenas de suministros, debatir el impacto de la inteligencia artificial y establecer un camino hacia economías que consideren la crisis climática y el factor humano.
El discurso de Biden, frente a los líderes sentados en una mesa circular, se centró en los efectos que la crisis climática tiene en la economía y subrayó la importancia de que todos los países unan fuerzas para evitar fenómenos de clima extremo, como sequías o inundaciones.
Durante las reuniones de la APEC ayer, el presidente mexicano evitó a la presidenta de Perú, Dina Boluarte, a quien califica de “usurpadora” tras tomar el poder por el golpe contra el expresidente Pedro Castillo en diciembre del año pasado.
López Obrador evitó cruzarse con Boluarte, a pesar de que a ambos les tocó estar a muy poca distancia el uno del otro durante la foto oficial.
Sin embargo, sí se fundió en un abrazo con el líder chileno, Gabriel Boric, en primera fila, y López Obrador, en la segunda, al terminar de fotografiarse.